Se trata de una cueva muy accesible por la que podremos movernos con mucha
facilidad por gran parte de la misma.
La cueva es realmente bonita, y en ella podemos ver columnas de hasta 10
metros y estalactitas de más de 5 entre otros elementos geológicos.
Para llegar a la cueva tendremos que dirigirnos a la población de Beniarbeig.
Una vez allí, a la entrada del pueblo cogemos el camio del “Racó dels Vinyals”
y tras recorrer por una pista menos de 2Km llegaremos a una pequeña explanada,
donde dejaremos el coche.
Desde este punto, enfrente de nosotros (mirando hacia la sierra) veremos
una roca en la que está escrito “Cueva”, y detrás un pequeño acueducto donde un
cartel nos indica el camino hacia la cueva con flechas amarillas. El camino no
tiene pérdida y simplemente deberemos seguir las indicaciones para llegar a la
cueva.
Tras un paseo de aproximadamente 30 minutos llegaremos a la cueva. La
entrada es una amplia galería de unos 10 metros de ancho. Desde la galería
iniciaremos el descenso de unos 35 metros (sin ninguna dificultad, excepto no
tropezarnos con alguna piedra), hasta llegar a una amplia sala donde veremos el
gran daño causado por vándalos sin ningún respeto por la naturaleza
(estalactitas y estalagmitas enormes rotas ). Desde esta galería iniciamos la
subida entre bloques resbaladizos por la humedad existente. En este punto nos
rodean coladas de gran tamaño y columnas de hasta 10 metros de altura. A partir
de deberemos encender la linterna y colocarnos el casco.
Después de la subida llegamos a la segunda sala, donde veremos una flecha que nos indica un recorrido circular por la galería.
Una vez finalizada la visita a la cueva, si queremos alargar nuestra
jornada, cerca de la cueva, a escasos metros, hay un avenc (cavidad formada por
pozos y galerías) que se encuentra al lado de la senda que sube al Portet de
Beniargeig.
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